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Sabores para endulzar tu paladar!

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Somos una de las heladerías más tradicionales de la ciudad, y es que desde 2009 nuestro local ha deleitado a los fanáticos de los helados… Si andas por la Tunja, una parada obligatoria es “Mis Abuelos Helado Artesanal Natural”. Nuestros locales son ideales para sentarse en familia o con tu pareja,  o simplemente ver pasar la vida mientras disfrutas tu helado.

 

 

En el 2010, Hernando Acevedo decidió comenzar su fábrica de helados, lo que más tarde se convertiría en una heladería icono de la ciudad de Tunja. Ahora, con 5 locaciones en Boyacá y Cundinamarca, sus ambientes siguen conservando esa decoración acogedora y familiar. En su carta hay más de 22 sabores de helado hechos con frutas naturales, los cuales se dividen en “Cremosos”, “Endulzados con Stevia”, y en “Agua”. Adicionalmente contamos con un menú variado y muchas otras alternativas para todos los gustos.

 

Todos nuestros helados son elaborados sólo con leche, crema de leche y frutas. Ofrecemos helados que además de ser artesanales, son preparados con productos orgánicos. Sus sabores van desde los tradicionales como el de chocolate, hasta los poco convencionales como los de Mielmesabe, Brevas con Arequipe y Bocadillo con Queso. Si eres de los que les gusta aventurar el paladar, jamás te arrepentirás de haber probado estas delicias.

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Visita cualquiera de nuestras sucursales y danos el gusto de atenderte!

Quienes Somos

Si tienes alguna pregunta o sugerencia, compártela con nosotros. Te responderemos lo mas pronto posible.

 

MIS ABUELOS

Helados Artesanales Naturales

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Cra 3#40-63

Barrio Santa Inés. Tunja, Boyacá. Colombia

Correo: heladeriamisabuelos@gmail.com

Móvil: +57 3125664915

Nuestra Historia

Una historia que contar:

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Después de toda una vida de trabajar en el campo Colombiano, de producir, cosechar y obtener bajos ingresos; y, viendo que el campo no tiene futuro rentable a corto plazo, comencé a investigar otras soluciones a mi fuerte crisis financiera. Con mi padre comentábamos que el progreso del campo estaba en la elaboración final de los productos que sacábamos en la finca en el municipio de Toca (Boyacá).  Lo primero que hice fue investigar que no había en Tunja, encontrándome que no existían helados naturales de consistencia cremoso fino, de fruta natural y sin químicos.

Sabiendo el objetivo final, inicie a investigar averiguándole a cuanto abuelito me encontrará en el camino ¿Cómo hacían antiguamente los helados?; investigando en bibliotecas, con nuestro amigo google, llegando hasta conocer la historia del helado.

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El helado es originario de la china, donde sus  emperadores  tenían empleados que subían a la sima de los nevados y bajaban con bloques gigantescos de hielo, donde sus pasteleros les colocaban encima unas pailas y comenzaban a batir el postre cremoso  hasta darle la consistencia del helado. Cuando los Romanos invadieron China, copiaron la fabricación de los helados y los realizaron en Roma, donde obtuvo el título – manjar de emperadores – y se servían en los grandes festines. Con el transcurrir del tiempo uno de los cocineros de palacio se hizo a la formula y los comenzó a hacer en la isla Chipre, donde fueron comercializados por primera vez.

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En cuanto a los trucos de los abuelitos se consiguieron datos como: Cuando llamaban a manteles – forma que se utilizaba para decir pasemos a la mesa -, se encontraba servida la crema de frutas acidas – limón, maracuyá, feijoa, lulo, etc. etc., y se la podía uno tomar al final de la cena y no se había cortado ni decantado; la forma de hacer diferentes postres de frutas sin que se acidificarán  conservando su sabor natural; la elaboración de la leche evaporada; y sobretodo las cantidades – pisca ( medida personal de ingredientes, que se hacía al coger la porción a medir con las yemas de los dedos índice y pulgar)  de cada ingrediente para lograr un sabor similar al que dan a las comidas las abuelitas, - para lo que tenía una báscula de bolsillo para pesar oro - .

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En este proceso de recopilación de datos e ingredientes, y a la elaboración y experimentación duramos tres años, donde dos o tres días a la semana tomábamos un litro de leche fresca y realizábamos las pruebas de evaporación, mezcla de ingredientes, etc., así aprendí a lavar hoyas quemadas y a realizar la base del helado. Con este método de prueba y error se  realizaban productos que eran dados a los amigos y vecinos de la finca, quienes nos daban su opinión. Después de tres años,  cuando los bancos ya no me permitían entrar, debido a las deudas adquiridas- ,y, de una helada que me quito la poca esperanza que tenía en un cultivo de hortalizas, logre tener la base para los helados, y con una duración de más de cuatro meses sin que cambiara su conformación, nos dimos a la tarea de sacar los primeros seis sabores – arequipe, chocolate, maracuyá, vainilla, curuba y mora – iniciamos ventas el 1 de Abril de 2010.

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Para realizar la iniciación del montaje de la micro empresa,  me toco empeñar la tierra que mucho tiempo labore, a un gran amigo, y con esto pude comprar mi primer congelador, los materiales para la elaboración y el primer arriendo. Poca gente, después de muchos intentos de formar mi industria, me veían con una empresa prospera,  pero ante mi insistencia – terquedad de empresario –, mi fuerza de trabajo, mi convencimiento y lograr el sueño que teníamos con mi padre, se me dieron las cosas y aquí vamos.

Otros Anécdotas

- Llevábamos 5 meses (aprox.) de labores cuando llego un grupo de 4 personas en un campero y pidieron cada uno un sabor distinto, luego pidieron los otros 4 sabores ( ya tenía 8 sabores) y se rotaron los helados para poder probarlos todos, después se acercó un señor y me pregunto si tenía registro Invima, para lo que asustado comencé a darle mil disculpas y razones por lo que no lo tenía, el señor me dijo que no me afanara, que es empleado de la gobernación  y que viendo la calidad de mis productos, me ven un gran futuro y que es deseo de la gobernación ayudar a la gente emprendedora para lo que me pidio que me acercará a la Gobernación de Boyacá, para realizar los

trámites para el registro Invima, y después de ese gran susto he sido acreedor de 2 registros Invima, con toda su tramitologia, donados por la gobernación, uno para los cremosos (Endulzados con Azucar y Stevia) y otro para los de agua.

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- Con el transcurso del tiempo más de una señora y algunos señores – todos mayores – me fueron indicando y enseñando como hacer diferentes  correcciones y sabores; como fue el helado de café que una dama, que venia de Duitama, se acercó y me enseño a hacerlo, trucos para que no se acidifique o amarguen los helados de agua de mandarina y naranja ( en la sucursal de Raquira), para que no se decanten los helados de maracuyá y lulo, y muchos más.

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- Para la realización de un nuevo sabor nos demoramos entre 2 y seis meses, pues primero hay que lograr sostener el sabor de la fruta, y después realizar por lo menos 5  pruebas con no menos de una semana entre ellas y cuando todas salgan iguales, hemos logrado un nuevo sabor. En este momento contamos con 22 sabores cremosos con azúcar, 8 cremosos con Stevía y 9 helados de agua.

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